El cinismo persiste, pero los hechos también...
El imperio, la fuerza, el fénix, devilstone, todos ellos han sido masacrados, la esperanza también.
¿Qué ha pasado desde entonces?
Inundaciones, nuevos terremotos, tratados ilegales legalizados, pactos conforme a lo que loa burócratas deseen, nadie hará nada, así que ¿qué más da? La promesa del regreso del PRI, el silencio de Grozny, la grandilocuencia de los cínicos, la visión de un mundo aún mucho más oscuro...
La Entropía ha terminado, pero seguiré de vez en cuando en contacto, pues espero que antes del vacío quede un último recurso extraordinario, que en algún punto dentro de la caja, Nietzsche repudiaría como esperanza, pues es el acto y la acción lo que mueve el mundo, lo cambia, no la tonta y conveniente esperanza, pero cuando ya se ha hecho más de lo que la carne permite, tendremos que rebajarnos a esta, y esperar, ya llegará el momento, yo persistiré, aguantaré la ventisca desde mi trinchera, y esperaré mi momento de resurgimiento, o ese donde la intromisión del vacío sea inevitable...
Desde el rincón más oscuro en el olvido...
DEVILSTONE
